Dos poemas de Luis Eduardo Gutiérrez


Gutiérrez nació en Ibagué. Codirigió el suplemento cultural del periódico El Nuevo Día de Ibagué y el taller de poesía de la Biblioteca Darío Echandía de la misma ciudad. Premio Nacional del concurso de Poesía Eduardo Cote Lamus (2007); Única Mención de Honor del Concurso Nacional de Poesía del Ministerio de Cultura (2010); Mención de Honor Concurso Nacional de Cuento Ciudad de Bogotá (2002) y Mención del Concurso Nacional de Poesía Antonio Llanos de Cali (1997). 
Libros Publicados: Perseguidos por el cielo (Ediciones Apertura, 1995); Los espejos de la Hidra (Ediciones Tiempo de Palabra, 2001); y Los Cuadernos de Franz (Ediciones Nueva Granada, 2008). Los siguientes poemas pertenecen al libro En la posada de J. Babel.


I.

Las mazmorras de esta mansión están habitadas
por músicos desastrados.
Muchos de ellos han sucumbido en los torneos
que el Señor realiza para conocer a los virtuosos del clavecín.
Tocar ese instrumento con poca fortuna,
propicia la elevación de los pendones rojos
en las almenas en señal de reprobación contra el músico infortunado.
Así
responde esta casa frente a los reveses del artista: con días de sombra en sus ya poblados
subterráneos


II.

El camino que conduce
a la casa de reposo deseada, está empedrado de aduladores
que intentarán rezagar al viajero en un burdel de mala música. A veces, de las aguas profundas de un estanque
surge una mujer de bellos cantos que conseguirá

retener en una tienda al caminante durante días; en ocasiones, durante años.